Como ya he expresado en entradas anteriores soy una amante de la radio, sin duda es aquel medio que significa compañía sin importar la condición social. Encontramos un sin fin de emisoras que se adaptan a las preferencias y gustos de diversos perfiles de oyentes y por ende manejan contenidos completamente distintos. Debo aclarar en esta entrada que sí, como todos tengo mis preferencias hacia ciertas emisoras y también aborrezco otras, pero más allá de eso quiero abrir este nuevo espacio diciendo que así como critico contenidos e incluso perfiles de ciertos locutores espero llegar a ser criticada cuando esté tras los micrófonos haciendo lo que me apasiona...eso sí, de manera constructiva y basando aquellas críticas en fundamentos.
En muchas ocasiones me he dicho a mí misma que como oyente no tengo la autoridad para criticar a quienes escucho, últimamente llegué a la conclusión de que es una idea errada y por eso a ustedes, oyentes, sin importar su condición o preferencias quiero decirles que no traguen entero y sean críticos ante lo que escuchan; al final nuestra opinión SÍ CUENTA, pues somos nosotros quienes hacemos que el trabajo del disc jockey valga la pena, el oyente y el disc jockey son la fórmula de la magia de la radio.
Hay ciertas emisoras que son bastante criticadas por la falta de creatividad de su equipo de trabajo, no quiero centrarme en un caso específico, cada quien sabrá si lo que escucha realmente se adapta a sus necesidades de oyente...y es que no hay que ser críticos profesionales para darnos cuenta de que sí, en efecto ciertas estrategias son obsoletas y que hay cosas que deben ser renovadas. A mi percepción en muchos casos es bastante evidente su desesperación por alcanzar los primeros puestos en sintonía y salir a presumir lo grande que es su audiencia...sus puestos en el ECAR (Estudio continuo de audiencia radial). Claro, yo no digo que sea un pecado buscar que el número de oyentes crezca, sería estúpido, pues al final toda emisora y su equipo buscan eso. Lo que realmente vengo a criticar es que a quieran insultar la inteligencia de su público imitando las estrategias de otras emisoras, que la creatividad no les dé más allá de hacer concursos donde el gran botín es dinero y no se atrevan a salir de su zona de confort.
Con seguridad digo, a nosotros los oyentes nos gusta que innoven, que nos sorprendan, que le apuesten a los contenidos, nos gusta sentir que su labor para nosotros conlleva esfuerzo y que aún más importante: Que nuestra voz cuenta. No quiero decir que el único deber de hacer radio con calidad es de quienes producen, crean y hablan, es un trabajo conjunto, donde nosotros como oyentes debemos exigir y así mismo el equipo de trabajo de una emisora debe darnos contenidos a nuestra altura.
¿Hablás de todos los formatos de emisoras o algunas en específico?
ResponderEliminarEn general, no cuestiono los formatos, más que todo es una invitación a ser críticos. ¡Saludos y gracias por leer!
Eliminar